Atrapar la magia de una mirada o el recuerdo de un instante, esa es mi pasión, la que me llevó a dedicarme en cuerpo y alma a la fotografía.
Me formé (y sigo formándome) a conciencia, para finalmente establecer mi estudio en Mieres, el corazón de Asturias, aunque a veces apunto con el objetivo de mi cámara mucho más lejos.